El oviducto o trompa de Falopio provee el medio ambiente físico y químico apropiado para la fecundación y los primeros estadios de desarrollo embrionario. El factor tubario es una de las principales causas de infertilidad femenina.
Aproximadamente un 25% de los casos de infertilidad femenina son debidas a trastornos tubáricos. Sumado a este porcentaje existe además un 5 a 10% de las parejas que no logran el embarazo a pesar de que los estudios realizados para evaluar las posibles causas del trastorno aparecen normales.
Los trastornos tubaricos mas frecuentes resultan en la enfermedad pélvica inflamatoria causada por infección polimicrobiana, provocando daños celulares con perdida de células ciliadas, con producción de exudado inflamatorio que genera adherencias en los pliegues de la mucosa. Otra causa es el hidrosalpinx donde las fimbrias no se reconocen.
Otras condiciones que pueden causar esterilidad son la fibrosis obliterativa, la salpingitis, la inflamación cronica, y la endometriosis, y menos frecuentemente los pólipos, la tuberculosis y la secuela de un embarazo ectópico.
La interacción entre el ovocito y el espermatozoide se produce en el oviducto, una vez completado el proceso de capacitación espermática se produce la reacción acrosomal necesaria para la fecundación.